El té verde

Durante siglos el té fue una bebida únicamente consumida en oriente y desconocida para el resto del mundo hasta el siglo XVI en que se popularizó su consume entre la clase alta europea, debido a su alto coste.

En la actualidad, después del agua, es la bebida más consumida en el mundo.

A diferencia de otros tes, las hojas de té verde no sufren el proceso de fermentación previa a su secado, por lo que no se pierden los polifenoles de la planta que son unos poderosos antioxidantes.

Aunque en España se comercializan bajo el mismo nombre, existen diversas variedades de té verde entre las que destacan: El Bancha, el Gyokuro, el Gunpowdweel, el Lung Ching, el Matcha, el Sencha y el Pi Lo Chun.

Respecto a sus características nutritivas, el té verde tiene un alto porcentaje de flúor en su composición, aunque también contiene potasio, calcio y magnesio y vitaminas del grupo B y pro-vitamina A.

Esta bebida, se considera una de las más saludables y ello se debe a la gran cantidad de beneficios que produce en el organismo la ingesta regular de este producto. Los beneficios probados más conocidos son:

• Alto poder antioxidante gracias a sus polifenoles. Esto se traduce en un fortalecimiento del sistema inmune y un retardamiento del proceso de envejecimiento.
• Anteriormente se citó el alto porcentaje de flúor presente en el té. Este micronutriente prevendrá la aparición de caries y placa dental.
• El sabor de este producto, se debe a su contenido en taninos que le proporcionan cierto poder astringente por lo que es un buen remedio contra la diarrea.
• Regula la absorción de grasa, favoreciendo a la reducción de los niveles de colesterol en sangre.
• Esta infusión presenta un bajo contenido en calorías por lo que se convierte en un gran aliado en las dietas de adelgazamiento si se sustituyen las bebidas azucaradas y gasificadas por el té. Además, el té verde es un potente diurético, eliminando la retención y facilitando la eliminación de líquidos.
• Ayuda a tener una piel hidratada y firme ya que facilita la oxigenación celular.
• Inhibe la liberación de tromboxano por las plaquetas, lo que evita la formación trombos en sangre.
• El té tiene teína, que al igual que la cafeína del café, es un potente estimulante.

Aunque no todo iban a ser ventajas. En contraposición, el té verde puede llegar a ser perjudicial si su consumo en exceso se prolonga en el tiempo. Fundamentalmente, puede llegar a provocar:

• Anemia, ya que el té verde reduce la absorción del hierro de la ingesta. Por ello, el consumo de esta bebida, está contraindicado en caso de anemia.
• Déficit en vitamina B1 (tiamina), ya que impide su aprovechamiento orgánico. Esto puede traducirse en fatiga y alteraciones nerviosas en general aunque cuando el déficit es severo, puede aparecer el síndrome de Korsakoff, que se caracteriza por pérdidas de memoria y confusión.