Los españoles creemos que comemos bien…pero no es verdad!

Los hábitos de alimentación de los españoles han cambiado mucho en los últimos años. La globalización ha traído consigo la introdución y aceptación de ciertas costumbres nada recomendables; comer «fuera de casa» algo «rapico», de «buen sabor» y a «bajo precio» son los ingredientes de un cocktel explosivo.

Lo peor? Que seguimos pensando que nos alimentamos bien y nos negamos a aceptar que debemos asumir hábitos más sanos…pero señoras y señores…debemos empezar a pensar de nuevo en nuestra salud alimentaria porque la dieta mediterranea ya ha muerto.

Estas conclusiones tan radicales las he sacado tras leer un artículo de El País titulado «Comemos fuera y cada vez peor«. Y es que estas son, muy resumidamente, las conclusiones del Análisis de la Fundación Española de la Nutrición, que entre muchos otros datos ha situado la tasa de obesidad en el 17% según datos del INE.

Los expertos relacionan este aumento de personas obesas con el cambio en el ritmo de vida de una importante parte de la población que, al vivir lejos de su trabajo se ve en la obligación de comer fuera.

Esta circunstancia no tiene por qué ser negativa, se puede comer fuera incluso mejor que en casa, pero sí es cierto que el contexto explica que la comida que ingerimos cuando no estamos en casa sea menos sana; podemos elegir y nos dejamos llevar por la apetencia, debe ser algo rápido y que sea sano o no nos da igual en ese momento de prisa y en muchas ocasiones la calidad de los productos deja mucho que desear. Otro cocktel mortal.

Uno de los aspectos que más me llamó la atención a la hora del artículo, y que, por cierto, considero cierto, es que el hecho de que exista la idea preconcebida de que los españoles comemos bien gracias a nuestra dieta mediterranea nos hace daño.

Este prejuicio está presente en el imaginario colectivo y al creerse así los españoles estamos menos receptivos a aceptar que debe cambiar sus hábitos para mejor. «Creemos comer mejor de lo que en realidad comemos, lo que se convierte en un problema a la hora de convencer a la gente», explicó Susana del Pozo, directora de Análisis de la Fundación Española de Nutrición.

Y cuál es la solución que apuntan los expertos para «solucionar» o al menos «poner un parche» al problema? Pues como muchos otros temas la respuesta está en la base, en la educación como arma para concienciar y crear ideas preconcebidas en los más jóvenes (nos alimentamos mal, hay que hacerlo mejor, come sano), que son nuestro futuro y en los que siempre depositamos nuestros «deseos imposibles» hoy por hoy.

El caso es que, como ya os conté unos meses, el Gobierno ya se ha puesto manos a la obra y ha creado una Campaña de concienciación llamada Naos que incluye la típica pirámide alimentaria (en su versión divertida, colorida e infantil) como arma explicativa para que a los más peques les quede bien gravada la idea de que una alimentación sana es fundamental para una buena vida.

Y como anécdota os diré que al acabar el artículo me paré un rato en los comentarios y leí uno muy simpático y que explica bastante bien este tema.

FRIOLO: «Y que es la dieta mediterranea? Porque yo lei una vez en un Burger King que su «comida era un fiel reflejo de la dieta mediterranea». Claro, con una definicion asi… todos comemos dieta mediterranea»

Vía: El Pais