Los aditivos son malos para la salud?

aditivos son malos para la salud

Los aditivos alimentarios son un recurso más de la tecnología alimentaria, y hay que recurrir a ellos cuando su utilización es estrictamente necesaria. Se añaden a los alimentos para asegurar su conservación, conservar o potenciar su aroma, dar color y mejorar su aspecto. Aunque esto puede ser positivo, muchas veces sólo vale para hacer comestibles productos de baja calidad ya que los aditivos se relacionan con innumerables peligros y efectos nocivos para la salud.

En España se admiten los aditivos aprobados por la Comunidad Europea, designados con números que comienzan por la letra E (Europa) y que se recogen en una lista aprobada en una Directiva europea actualizada con regularidad.

En total, están autorizados 345 aditivos, de los cuales sólo se emplea habitualmente un pequeño porcentaje (125) y el resto se usa sólo en casos muy concretos. La industria alimentaria puede usar únicamente los que han sido aprobados tras haber pasado por largos, detallados y exhaustivos estudios que verifiquen que, con las dosis autorizadas, no pueden causar ningún efecto dañino para la salud de las personas.

Para saber si tomamos aditivos, hemos de mirar en las etiquetas de los alimentos envasados en el apartado donde dice ingredientes. La normativa de cada país respecto al etiquetaje de los alimentos puede variar pero en general es obligatorio especificar todos los ingredientes y eso incluye a los aditivos.

Un detalle muy importante a tener en cuenta es que a veces podemos encontrar los aditivos alimentarios figurando en forma de número (por ejemplo E102) o con su nombre (por ejemplo Tartracina).

Los aditivos alimentarios que consumimos con los alimentos están sujetos a unos requisitos rigurosos respecto a su inocuidad y han sido aprobados por las autoridades sanitarias. Por aditivo alimentario inocuo se entiende aquel que no constituye un riesgo para la salud si se consume en la concentración empleada.

El problema es que cada día, sin saberlo, estamos tomando aditivos alimentarios en mayor cantidad y juntos. Muchas personas reaccionan con dolores de cabeza, alergias, picores, etc. Lo ideal en estos casos es intentar tratar de detectar que alimento nos produce los síntomas y ver qué aditivos alimentarios contiene.

A la hora de comprar un producto, por ejemplo una mermelada de fresa, podemos observar que una marca contiene sólo fresa y azúcar y en cambio otra puede contener colorantes y saborizantes. La verdad es que cada vez es más fácil encontrar productos libres de aditivos alimentarios.

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2 comentarios

  1. Hola me gusta esta paguina sinembargo e gustaría que especificarán que alimentos publicitarios son malos para la salud

  2. No me convence:

    «La industria alimentaria puede usar únicamente los que han sido aprobados tras haber pasado por largos, detallados y exhaustivos estudios que verifiquen que, con las dosis autorizadas, no pueden causar ningún efecto dañino para la salud de las personas.»

    Los «poderosos (Empresarios con muchisimo dinero)», facilmente manipulan estos exhautivos estudios, ya q se ha demostrado q muchos de estos aditivos generan una lista larga de enfermedades q el paso del tiempo van apareciendo, VIDA SANA…

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