Azúcar de coco, un edulcorante sano y natural
Es dulce, barata y es todo natural, pero la reciente producción de azúcar de coco tiene aún que encontrar un mercado rentable en Indonesia, uno de los mayores importadores del edulcorante.
En una época donde la mayor parte del azúcar viene muy bien embalada tras ser procesada en fábricas, un grupo de agricultores de la provincia de Este de Java está confiando en un método casero antiguo para producir caramelo, con una variedad de coco que existe en abundancia.
En los años 30 del siglo XX, Indonesia fue el segundo mayor exportador de azúcar, y ahora es uno de los grandes importadores. La mayoría del azúcar disponible es blanca, refinada y de caña, lo que hace a esta forma tradicional procesada del coco una rareza.
En el pueblo de Gondoreso, en la tropical provincia del Este de Java, los granjeros trepan a los árboles de coco dos veces al día para recolectar la savia pegajosa que hace el azúcar.
Después llevan la savia a casa, la calientan en grandes sartenes hasta que se forma un espeso líquido y después la ponen en moldes especiales hechos de cáscaras de coco, y lo dejan ahí hasta que endurece.
Muchos indonesios dicen que el terrón oscuro y crudo del azúcar de coco es un paso atrás, pero granjeros como Wijiono están determinados a mantener viva la tradición con la ayuda de un programa del Gobierno que permite a las refinerías del Estado comprar esta materia prima a los agricultores.
«Nos agarramos a esta forma tradicional de hacer el azúcar de coco porque si producimos todo el azúcar con fábricas modernas (molinos) esto matará a los agricultores», dijo Wijiono, que sólo quiso dar su nombre.
