La lechuga y los gases ¿Cómo evitarlos?
Ya sea iceberg, rizada, roble, etc. la lechuga, y los gases que produce pueden convertirse en toda una molestia para muchas personas, aunque hay que decir que es uno de los alimentos que no deben faltar en nuestra dieta, tanto si queremos adelgazar como si queremos comer una forma equilibrada. A pesar de que es de sobra conocido que la lechuga da gases, si tenemos este problema podemos utilizar diferentes remedios caseros como la manzanilla para reducirlos.
Además de ingerir muchos alimentos ricos en fibra, como la lechuga, comer con premura puede hacer que aparezcan los incómodos gases dado que se traga más aire en la ingesta de comida. Otra causa puede ser que sea un alimento mal tolerado y produzca esta reacción en algunas personas.
Debemos apuntar que la lechuga no da gases a todo el mundo sino que solo afecta especialmente a aquellas personas que cuentan con un sistema digestivo delicado. Esto sucede por la alta cantidad de fibra que tiene este alimento, a lo que puede acompañar también una ligera hinchazón abdominal que puede ser molesta, algo que puede evitarse con sencillos trucos caseros para no privarnos de comer este fantástico alimento.
¿Cómo evitar los gases producidos por la lechuga?
- Debemos tratar de comer con más calma para así evitar la entrada de aire. Esto puede ayudarnos considerablemente en todo tipo de digestiones.
- Además de comer con más calma, los expertos recomiendan masticar más veces la lechuga antes de tragarla. De esta forma, el tracto digestivo no tiene que hacer demasiado trabajo para descomponerla.
- Podemos utilizar plantas medicinales en la misma ensalada como echarle hojas de menta, dado que nos ayudará cuando las digestiones son demasiado lentas.
- Tras la comida podemos tomar diferentes infusiones con propiedades digestivas que nos ayudarán a digerir mucho mejor las comidas como la manzanilla, boldo, alcaravea, hinojo, anís estrellado, comino, anís verde, melisa, etc.
