Trucos perder peso
¿Buscas trucos para bajar de peso? Bajar peso es un proceso lento y muchas veces complicado, y si queremos que adelgazar sirva de algo, es así como tiene que ser. Ir bajando kilos de forma progresiva permite que nuestro cuerpo se acostumbre a sus nuevas dimensiones (evitando estrías y flacidez) y sobre todo asegura los resultados a largo plazo.
Quizá a veces una se sienta tentada a dejar de comer una semana y adelgazar 6 kilos de golpe, pero eso deja de ser tan atractivo cuando piensas que 15 días después no estarías como al principio…¡sino peor debido al efecto rebote!
Hay una serie de hábitos que, una vez que los interiorizamos, dejan de resultar costosos y que son los que nos llevan por la senda de adelgazamiento efectivo. Es fundamental seguir una dieta variada y ser capaces de disfrutar con la comida, porque si no la dieta se convertirá en un suplicio.
¿Sabes qué tienes que hacer para adelgazar sin que esto ocurra?
En el supermercado
- No acudas a la compra con hambre, o acabarás eligiendo los productos más calóricos. Si no es posible para ti ir después de comer, toma una manzana antes de ir. Y vete siempre con una lista cerrada de los productos que necesitas.
- Sustituye alimentos refinados como el pan, la pasta, el arroz o las galletas por integrales. Aportan más vitaminas, dan mayor sensación de saciedad, cuentan con más fibra y resultan menos calóricos.
- NUNCA compres bollería industrial o precocinados. Ya no es cuestión sólo de peso, sino también de salud . Si no lo tienes en casa, no lo comerás. Trata de evitar las zonas del supermercado donde están estos productos para evitar tentaciones.
- Llévate postres a casa. Si tienes postres más sanos te generará menos ansiedad no tenerlos insanos. Compra yogures o queso fresco para tal fin.
- Llena tu carrito de frutas y verduras. Si es lo que tienes a mano es lo que comerás.
En casa
- No bases tus platos en los fritos. Opta por otros modos de cocinar como a la plancha, al vapor o al horno. Utiliza la mínima sal necesaria y busca salsas ligeras. Realza el sabor de los platos con especias o aliño de limón. Recuerda que es fundamental que disfrutes del sabor de los alimentos para que seas feliz en tu dieta.
- Usa sartenes anti-adherentes. No tendrás que engrasar tanto la sartén para que la comida no se pegue, por lo que acabarás cocinando con menos aceite.
- Mejor que falte que que sobre. Mide bien las cantidades para no pasarte con el tamaño de las raciones. Si cocinamos más, comemos más, ya que no nos gusta que quede en la sartén. Además, si has cocinado demasiado, échate la ración adecuada y aleja la olla. Cuanto más lejos esté menos probable es que te levantes a por más. El resto congélalo.
- Un buen truco es comer la comida principal en platos de postre. Al ser más pequeños podemos llenarlos a rebosar con menos comida y tendremos la sensación de que ya hemos acabado con lo que nos correspondía.
- Lávate los dientes justo después de acabar de comer. Te disuadirá de seguir picoteando.
En el restaurante
- Comer en un restaurante no es carta blanca para hacer una tregua en la dieta. Sabes que en cualquier sitio se pueden pedir platos sanos y si no lo haces no busques excusas, es porque no quieres. Pide de primero algún plato con vegetales y sin salsas calóricas y de segundo, alguna carne o pescado a la plancha.
- No bebas mucho alcohol. Ya no sólo por las calorías que ingieres, sino porque relaja tu sistema de control mental. Te costará más seguir tu dieta si has bebido.
- De postre, lo ideal es tomar fruta o un sorbete.
- Si te has pasado con la comida, haz una cena ligera y depurativa: prueba con un té y una macedonia. Probablemente sea tu propio cuerpo quien note que no puede más. Especialmente si eres constante con la dieta, te acostumbrarás a comer más sano, y eliminarás la apetencia por alimentos grasos.
- Si comes todos los días fuera de casa, una buena opción es cambiar el restaurante por el táper. Es más barato y puedes planificar mejor tus comidas para que se adecúen a tu dieta.
Haciendo deporte
- Debes realizar ejercicio físico a diario para perder el máximo número de calorías. Si no puedes realizar deporte todos los días integra el ejercicio en tu vida: prescinde del coche y del ascensor.
- Es más fácil apuntarse a un gimnasio que tratar de hacer ejercicio uno sólo. Haber pagado motiva para ir. Lo mejor es buscar actividades que nois motivan y hacerlas en grupo. Apuntarte a clases para aprender algo (ya sea tenis, baile o yoga) genera un compromiso al saber que tu profesor está «esperando» por ti. Eso sí, busca siempre actividades que disfrutes o acabarás buscando todo tipo de excusas para no hacerlo.
- Combina actividades aeróbicas (son los ejercicios que aumentan el ritmo respiratorio y cardíaco, como correr, aerobic o andar en bici) con la tonificación muscular. Un aumento de la masa muscular produce una aceleración del sistema basal, que lo tiene más fácil para quemar calorías aún estando n reposo.
- Haz al menos media hora de ejercicio. Es a partir de los 30 minutos cuando el cuerpo, tras agotar las reservas de glucógeno, comenzará a quemar grasas.
- Busca actividades de ocio activas. Pues aprovechar los fines de semana para hacer senderismo en el monte, para organizar un plan con deportes de aventura o para bailar durante horas en la discoteca.
Recomendaciones generales
- No te saltes ninguna comida. Muchas veces nos sentimos mejor saltándonos la cena tras una comida copiosa o prescindiendo del desayuno para perder peso. Es un gran error ya que causa desajustes (llegamos a la siguiente comida hambrientos) y a largo plazo puede contribuir a que subamos de peso, ya que nuestro organismo se acostumbra a almacenar grasa para los periodos en los que no se le suministra.
- Haz cinco comidas al día. Es mejor comer muchas veces poco, que pocas veces mucho. Las comidas más calóricas hazlas por la mañana. Tras la cena, deja pasar dos horas -como mínimo- antes de acostarte.
- No renuncies a los hidratos de carbono. A pesar de su mala fama, resultan saciantes y se necesita consumir una gran cantidad de hidratos de carbono para que se acumulen en forma de kilos (a diferencia de las grasas, que enseguida afectan a nuestro cuerpo). Además los carbohidratos incrementan el gasto calórico, es decir, nos ayuda a quemar más calorías a un mismo nivel de actividad.
- Come variado. Debes comer de alimentos de todos los grupos, ya que todos son necesarios. Una dieta que recurra siempre a los cinco platos menos calóricos acaba aburriendo, y esa es una razón de peso que te puede llevar a abandonar tu dieta.
- Mucha paciencia. No te obsesiones con la necesidad de bajar peso ni te peses cada cinco minutos. El objetivo es cambiar tus hábitos para disminuir tu peso de forma gradual. No te frustres si te estancas en un momento dado, trata de aumentar tu gasto calórico a través de más ejercicio físico. Pésate una vez a la semana, desnud@ y en ayunas.
¿Cuáles son las mayores dificultades con las que te encuentras a la hora de bajar peso?