Qué alimentos te ayudan a evitar el hinchazón abdominal?
Muchas veces te levantas con el vientre plano, cómoda con tu cuerpo, pero a lo largo del día tu abdomen se va hinchando y ya por la tarde sientes que no estás en tu propia piel…te ocurre? Muchas veces a mí sí y lo cierto es que prevenirlo es más fácil de lo que crees y la última comida del día tiene mucho que ver.
Hay muchas razones que explican el aumento del tamaño de nuestron abdomen a lo largo del día, pero básicamente lo que ingerimos es fundamental. El caso es que una excesiva acumulación de gas en nuestro tracto digestivo (lo habitual son 100 mililitros) provoca esta hinchazón y hay alimentos que favorecen la acumulación.
- Las comidas ricas en proteínas, sobre todo de origen animal, dificultan la digestión y aumentan el almacenamiento de gases. Elige mejor carnes blancas, huevos y pescados, que no generan tantas sustancias tóxicas.
- Las cenas abundantes y grasas dificultan tu descanso y pueden hacer que te levantes hinchada.
- Bebidas carbónicas: si te excedes producen hinchazón e inflamación.
- Comer con asnsiedad o/y estrés también influye. Es importante masticar bien para tener una mejor digestión. Además, comer rápido provoca una mayor ingesta de aire y por lo tanto, hinchazón.
- Tumbarse después de comer, es decir, relajarse demasiado tras la comida evita una buena digestión.Y es que los músculos abdominales se distienden y eso da lugar a la hinchazón.
¿Qué hacer para solucionarlo?
- En relación con lo anterior, evidentemenete no debes excederte en el consumo de grasas animales, evitar las cenas abundantes y las bebidas carbonatadas, no comer con ansiedad y olvidarte de la siesta tras la comida, y además…
- Ajusta tus hábitos alimentarios: es importante que tus menús sean equilibrados y cuenten con los diferentes tipos de alimentos.
- Haz cinco comidas al día; así repartirás tuas necesidades alimenticias y no comerás muchísimo en dos o una ocasión unicamente. El almuerzo y la merienda son recomendables.
- Acostúmbrate a una dieta baja en sal. Cuando abusamos de la sal provocamos una acumulación innecesaria de sodio que hace que nos hinchemos. 3 gramos de sal al día son la dosis perfecta.
- Limita la ingesta de dulces: una exceso de azúcar refinado impide que los líquidos se muevan correctamente y pueden llegar a bloquear el buen funcionamiento de los riñones, así que evítalo!
